Árboles de mango y motivación

Marlen Maddux. Foto por Tatiana Peña / JEFAS Magazine

Por Brianne Sanchez, JEFAS Magazine

Descubra cómo el espíritu emprendedor de Marlen Maddux transformó su vida y empoderó a su comunidad. Conozca su viaje inspirador y su impacto en los inmigrantes. 

Cuando Marlen Maddux era una niña pequeña que crecía en la zona rural de Atlántida, Honduras, compartió sus esperanzas para el futuro con un confidente improbable: un árbol de mango en la granja de su familia. Sentada a la sombra de su árbol favorito, se imaginó que algún día seguiría una carrera fuera de casa y criaría a dos hijos a los que pudiera colmar de atención. “Es importante que las niñas tengan sueños”, dijo Maddux.

Ahora es una exitosa oficial de préstamos hipotecarios y copropietaria de Radio Iowa en Línea, una estación de radio en línea en español con sede en Iowa, y tiene dos hijas mayores y tres nietos. Durante un descanso de la reunión con los clientes, Maddux reflexionó sobre sus primeras ambiciones y cómo superó los reveses para lograr la realización profesional y personal que anhelaba la pequeña Marlen.

“Creo que siempre tuve una mente emprendedora”, dijo Maddux. “Recuerdo vender queso y mangos en mi ciudad natal cuando tenía unos ocho años. Ponía todo en una canasta, iba y vendía. Esa era mi personalidad. Siempre supe que quería ser una mujer que mantuviera a la familia”.

En sus memorias de 2016, Los frutos de la voluntad inquebrantable: una historia real, Maddux escribió sobre cómo fue crecer como el tercero de ocho hijos, rodeado de una familia extendida. Tiene dulces recuerdos de jugar en el campo, pescar con sus hermanos y atender las tareas del campo con su padre. Pero la tragedia y el dolor provocados por los huracanes (primero la muerte de su padre y luego la devastación de su casa en 1998) la llevaron a un peligroso viaje a Estados Unidos. Maddux tuvo que dejar a sus hijas pequeñas, de 8 y 2 años, con una tía hasta que pudo establecerse allí legalmente. “Tenemos una historia muy singular: no vi a mis hijos durante seis años”, dijo.

La hija mayor de Maddux, Keilin Isaacson, siguió los pasos de su madre y se convirtió en agente de bienes raíces. Ella y su hermana se unieron a la Guardia Nacional del Ejército de los EE. UU., recordando los helicópteros de socorro de los Estados Unidos que los alimentaron y mantuvieron con vida durante el huracán. Keilin ahora es capitán.

Maddux dice que sus hijos y nietos son su motor y la impulsan a seguir adelante.

El espíritu emprendedor: ayudar a su comunidad a prosperar

Las necesidades de su comunidad, especialmente los inmigrantes y los latinos, también la han inspirado a asumir nuevos desafíos. En 2017, Maddux pasó de ayudar a las personas a encontrar la casa de sus sueños a desmitificar el aspecto de los préstamos hipotecarios en el sector inmobiliario. Vio la oportunidad de dedicarse a su pasión por las finanzas y quería ayudar a las personas a comprender mejor el impacto de las hipotecas en sus presupuestos. “No me gusta decir: ‘Estás aprobado, vamos a comprar tu casa'”, dijo Maddux. “Me gusta educar a la gente. Nuestra gente necesita entender lo que están firmando. Necesitan entender cuál será su pago mensual”.

Empoderar a través de la radio: un nuevo emprendimiento para Marlen Maddux

El impulso de Maddux por compartir información recibió un impulso en 2021 cuando ella y sus cofundadoras, Adriana Soto y María Palma, lanzaron su estación de radio en línea. Radio Iowa en Línea comenzó como una respuesta a la falta de información en español disponible durante la pandemia de COVID-19. Maddux estima que tuvieron 30.000 oyentes en su primer mes. Continúan transmitiendo diversos programas de radio y música entre semana, de 7 a. m. a 8 p. m. Los viernes por la mañana, de 7 a 9 a. m., los oyentes pueden ver a Maddux, Soto y Palma presentando un programa con llamadas donde conversan sobre lo que sea que tengan en mente, desde la menopausia hasta la cena. Es el último ejemplo de cómo prevalece su espíritu emprendedor. “Todos los días, todas las puertas a las que llamo se han abierto”, dijo Maddux. “Cada puerta tiene una sorpresa esperándome al otro lado. Nunca rendirse es la clave… Puedes quedarte sin gasolina, puedes quedarte sin comida, pero tu corazón sigue con la misma visión todos los días. Nada te detendrá”.

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