Por Jefas Magazine
Cuando Fátima Bosch, Miss Universe México 2025, fue escoltada fuera de un evento oficial a principios de esta semana, el episodio pudo haber terminado en silencio. En cambio, convirtió el momento en una declaración —una que ahora resuena mucho más allá del escenario del certamen.
“No soy una muñeca que se pueda maquillar, peinar y vestir”, dijo Bosch en un video que rápidamente se volvió viral. “Vine aquí para ser una voz para las mujeres. Y quiero que mi país sepa que estoy comprometida con eso.”
Sus palabras, firmes, emotivas y profundamente significativas, han generado titulares a nivel mundial y despertado orgullo entre las latinas en todo el mundo, quienes ven en Bosch un reflejo de su propia lucha por ser vistas y escuchadas.
¿Qué fue lo que realmente pasó?
El incidente ocurrió el 3 de noviembre durante un evento oficial de Miss Universe transmitido en vivo por Facebook. Nawat Itsaragrisil, presidente de Miss Universe para Asia y Oceanía, hablaba con las concursantes sobre sus “responsabilidades”, que incluían publicar en redes sociales y participar en videos promocionales.
En un momento, supuestamente se refirió a las participantes que no cumplían con estas tareas como “tontas” y luego se dirigió directamente a Bosch. La señaló públicamente, afirmando que ya no respondía a la organización mexicana del certamen, sino a los funcionarios en Tailandia. Cuando Bosch lo interrumpió para cuestionar algunos de sus comentarios, él ordenó a los guardias de seguridad que la retiraran del lugar.
Sororidad en acción
Mientras el momento se tornaba tenso, Victoria Kjær Theilvig, actual Miss Universe y representante de Dinamarca, se levantó y abandonó la sala en señal de apoyo a Bosch. Varias concursantes más la siguieron, enviando un mensaje de solidaridad que fue más allá de las bandas y las coronas.
Lo que vino después fue aún más poderoso.
Bosch publicó un video en TikTok, hablando con franqueza en español a sus seguidores:
“Solo quiero que mi país sepa que no tengo miedo de alzar la voz. Tengo un propósito. Tengo cosas que decir.”
En cuestión de horas, su mensaje fue retomado por medios internacionales. El hashtag #ImNotADoll comenzó a hacerse tendencia, con miles de mujeres compartiendo sus propias historias sobre haber sido silenciadas, ignoradas o subestimadas.
La respuesta oficial
La organización de Miss Universe abordó rápidamente la controversia. Su presidente, Raúl Rocha Cantú, emitió un comunicado calificando el comportamiento de Itsaragrisil como “inaceptable” y reafirmando el compromiso del certamen con el respeto y la dignidad de todas las concursantes.
Posteriormente, Itsaragrisil ofreció una disculpa pública en una transmisión en vivo:
“Si alguien se sintió incómodo o afectado, ofrezco mis más sinceras disculpas. Ya hablé con las demás chicas que estaban en la sala, unas 75 en total.”
Aun así, para muchos observadores, la disculpa llegó demasiado tarde.
Más que un certamen, un movimiento
El concurso de Miss Universe 2025 se celebrará el 21 de noviembre en Pak Kret, Tailandia. Pero, sin importar el resultado, la voz de Fátima Bosch ya dejó huella.
Puede que esté representando a México, pero también representa a todas las chicas que alguna vez escucharon que eran “demasiado”: demasiado ruidosas, demasiado opinadas, demasiado atrevidas. Y para todas las mujeres que han tenido que luchar el doble para ser escuchadas, su mensaje es claro:
No necesitas permiso para ocupar tu lugar. Y no eres una muñeca.
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